Nevus oculares

Nevus conjuntival

Son lesiones planas o ligeramente sobre elevadas, móviles y de color marrón homogéneo, en la que pueden aparecer quistes de color más claro. Son tumores benignos, de los más frecuentes del ojo. El nevus conjuntival suele ser congénito, en los primeros años de vida tiene un color más claro o rosado, que se oscurece volviéndose marrón durante la segunda década de la vida, a partir de entonces suele permanecer estable a lo largo de la vida.

El riesgo de malignización es bajo. Es preciso el seguimiento de las lesiones para detectar cambios sospechosos en las mismas, y ante cualquier cambio en el tamaño o color debe acudir al oftalmólogo para valoración.

NEVUS CONJUNTIVAL
NEVUS CONJUNTIVAL
NEVUS CONJUNTIVAL

Melanosis conjuntival

La melanosis y los nevus conjuntivales son lesiones planas, móviles y de color marrón homogéneo. Son tumores benignos, de los más frecuentes del ojo. El nevus conjuntival suele ser congénito y permanecer estable a lo largo de la vida, es más pequeño, limitado y levemente sobreelevado. La melanosis conjuntival es más difusa y plana. Puede ser congénita (más habitual en raza negra) o adquirida (primaria o secundaria a otras lesiones).

El riesgo de malignización en general es bajo, siendo más elevado en la melanosis adquirida primaria cuando aparece atípia. En todos los casos es preciso el seguimiento de las lesiones para detectar cambios sospechosos en las mismas

MELANOSIS CONJUTNIVAL
MELANOSIS CONJUNTIVAL_
MELANOSIS CONJUNTIVAL

Nevus de iris

El iris es un lugar habitual para la presencia de nevus. Son más frecuentes en ojos de color claro. Son pequeños y planos o ligeramente sobre elevados y no distorsionan la anatomía normal del iris. Pueden aumentar de tamaño ligeramente y volverse más oscuros en la adolescencia. Es importante diferenciarlos de otras tumores como el melanoma o el leiomioma, y de otras patologías como nódulos en enfermedades inflamatorias o cambios en la coloración por atrofias de distinto origen (uveitis, síndrome heterocrómico de Fusch, etc.)

Es preciso el seguimiento de las lesiones para detectar cambios sospechosos en las mismas, y ante cualquier cambio en el tamaño o color debe acudir al oftalmólogo para valoración.

NEVUS IRIS
NEVUS IRIS
NEVUS IRIS

Nódulos de Koeppe

Se trata de pequeños nódulos en el borde de la pupila, provocados por acúmulo de células inflamatorias en procesos de uveitis anterior, principalmente en el subgrupo denominadas granulomatosas, en las que hay que descartar enfermedades asociadas como la tuberculosis, sífilis, sarcoidosis y esclerosis múltiple  entre otras.

Nevus coroideo

Es el tumor intraocular más frecuente. Suelen ser un hallazgo causal en la exploración del fondo de ojo ya que no suelen provocar síntomas. Pueden provocar pérdida de visión si afectan a la mácula.

Son planos o ligeramente sobre elevados, con bordes bien definidos. Es habitual la presencia de drusas en el interior así como atrofias e hipertrofias del epitelio pigmentario adyacente. En algunos casos presentan fluido intra o subretinano, que puede ser causa de pérdida de visión si afecta a la mácula.

Es importante el seguimiento mediante fondo de ojo para detectar cambios sugerentes de malignización como crecimiento, fluido subretiniano, etc.

NEVUS COROIDEO
NEVUS COROIDEO
NEVUS COROIDEO

Hipertrofia congénita de epitelio pigmentario de la retina

La hipertrofia congénita de epitelio pigmentario de la retina (CHRPE) es una lesión de etiología desconocida, pigmentada, de color negro intenso con áreas de despigmentación adyacentes o en el interior (lagunas), generalmente de un diámetro papilar de tamaño aunque éste puede ser muy variable. Pueden ser lesiones aisladas o múltiples y suelen aparecer en media periferia  temporal, polo posterior y cerca de la papila.

Estas lesiones no tienen ninguna trascendencia, salvo que afecten a la mácula y puedan provocar pérdida de visión, pero ese caso es excepcional. No tienen ni necesitan tratamiento. Pero en algunos casos, las formas atípicas, se asocian con la poliposis colónica familiar, que es una enfermedad hereditaria que conduce irremediablemente al cáncer de colon, por lo que en caso de detectar estas lesiones en el fondo de ojo, es muy fundamental el estudio del paciente por un especialista digestivo.

CHRPE

Melanoma de coroides

Es el tumor intraocular maligno primario más frecuente. El diagnóstico puede ser un hallazgo casual en una revisión de fondo de ojo o por síntomas variables como pérdida de visión, miodesopsias, etc.

Se trata de una lesión sobre elevada de pequeño a gran tamaño, generalmente de color marrón o gris aunque puede ser blanquecino en algunos casos. Presenta signos característicos de malignidad como pigmentación naranja en el interior, forma de champiñón en la ecografía (por rotura de la membrana de Bruch) o desprendimiento exudativo de retina asociado.

El pronostico hoy en día ha mejorado gracias a nuevas técnicas tanto de diagnóstico precoz como de tratamiento, que depende del tamaño y la localización, pudiendo ser cirugía, braquiterapia o enucleación.

MELANOMA COROIDES
MELANOMA COROIDES
MELANOMA COROIDES